Me pareció interesante el tema, no tenía ídea sobre la existencia de este "monumento" si no hasta que lo mencionó en un comentario del sr.Agnos (en el topic La abadía de los muertos)
El inicio de la guerra con Castilla en 1640, hizo de Campomaior el segundo centro militar más importante del Alentejo, después de Elvas. Desde entonces, ingenieros militares, soldados, mercenarios, municiones y pólvora aprovisionaban a esta población fronteriza para contener el ataque de las tropas españolas que incesantemente asediaban la población.
Ocurrió un 15 de septiembre de 1732. Amaneció soleado. A medida que avanzaba el día se fueron formando nubarrones de desarrollo vertical que presagiaban la tormenta al caer la tarde. Eran las 3 de la mañana y todos dormían. Se desató una terrible tormenta seca y la mala suerte quiso que un rayo cayese sobre la torre del castillo donde se almacenaban cantidades ingentes de explosivos (“6.000 arrobas de pólvora e 5.000 munições”). La explosión fue tan brutal que acabó con la vida de las 2/3 partes de la población portuguesa de Campomaior. 34 años más tarde, se construyó una capilla en memoria de los que murieron en la explosión, una macabra obra religiosa donde se emplearon los huesos y las calaveras de aquellos muertos, más de 800, según las crónicas de la época.
Los huesos nos hablan, nos invitan a meditar sobre la muerte y lo efímero y transitorio de nuestras vidas terrenales: “Nos, ossos que aquí estamos, pelos vossos esperamos”, esto es: nosotros, huesos que aquí estamos, por los vuestros esperamos.
La Capela dos ossos de Campomaior, es la segunda mayor capilla de huesos portuguesa, precedida por la Iglesia de San Francisco (Évora), construida con los esqueletos de 5.000 personas (fotografías). Otra capilla de menor tamaño se encuentra en la Iglesia de Nuestra Señora del Carmen, en la localidad de Faro. Hay otras capillas más o menos conocidas repartidas por el mundo: Iglesia Capuchina de la Inmaculada Concepción de la Vía Vénetto (Roma), Brno (República Checa)…y cosas parecidas como el infame museo del holocausto de Ruanda, algo de lo que apenas nadie se acuerda pero que bien merece una profunda reflexión sobre la incapacidad internacional para contener tales cotas de violencia, crueldad y desprecio por la vida humana.
Algunas imagenes :
Fuente: http://ciudad-dormida.blogspot.com
El inicio de la guerra con Castilla en 1640, hizo de Campomaior el segundo centro militar más importante del Alentejo, después de Elvas. Desde entonces, ingenieros militares, soldados, mercenarios, municiones y pólvora aprovisionaban a esta población fronteriza para contener el ataque de las tropas españolas que incesantemente asediaban la población.
Ocurrió un 15 de septiembre de 1732. Amaneció soleado. A medida que avanzaba el día se fueron formando nubarrones de desarrollo vertical que presagiaban la tormenta al caer la tarde. Eran las 3 de la mañana y todos dormían. Se desató una terrible tormenta seca y la mala suerte quiso que un rayo cayese sobre la torre del castillo donde se almacenaban cantidades ingentes de explosivos (“6.000 arrobas de pólvora e 5.000 munições”). La explosión fue tan brutal que acabó con la vida de las 2/3 partes de la población portuguesa de Campomaior. 34 años más tarde, se construyó una capilla en memoria de los que murieron en la explosión, una macabra obra religiosa donde se emplearon los huesos y las calaveras de aquellos muertos, más de 800, según las crónicas de la época.
Los huesos nos hablan, nos invitan a meditar sobre la muerte y lo efímero y transitorio de nuestras vidas terrenales: “Nos, ossos que aquí estamos, pelos vossos esperamos”, esto es: nosotros, huesos que aquí estamos, por los vuestros esperamos.
La Capela dos ossos de Campomaior, es la segunda mayor capilla de huesos portuguesa, precedida por la Iglesia de San Francisco (Évora), construida con los esqueletos de 5.000 personas (fotografías). Otra capilla de menor tamaño se encuentra en la Iglesia de Nuestra Señora del Carmen, en la localidad de Faro. Hay otras capillas más o menos conocidas repartidas por el mundo: Iglesia Capuchina de la Inmaculada Concepción de la Vía Vénetto (Roma), Brno (República Checa)…y cosas parecidas como el infame museo del holocausto de Ruanda, algo de lo que apenas nadie se acuerda pero que bien merece una profunda reflexión sobre la incapacidad internacional para contener tales cotas de violencia, crueldad y desprecio por la vida humana.
Algunas imagenes :
Fuente: http://ciudad-dormida.blogspot.com